Sobrepuerto es una pequeña zona del Pirineo Oscense situada entre los ríos Gállego y Ara, entre las Comarcas del Alto Gállego y Sobrarbe, tierra de Biescas, el valle de Broto-Ribera de Fiscal y Yebra de Basa. Zona montañosa, con altitudes entre los 1000 metros de Forcos y los 2030 del Manchoya. Sus aguas discurren por el barranco de Otal y el de la Valle de Cortillas, confluyendo bajo Bergua en el barranco de Forcos, que desemboca en el Ara, cerca de Fiscal.
Estaba poblado hace años: Ainielle, Ayerbe de Broto, Basarán, Bergua, Cillas, Cortillas, Escartín, Otal y Sasa de Sobrepuerto. Además, las pardinas de Fenés, la Isuala y Niablas.
La climatología es muy dura: inviernos fríos y largos, veranos cortos y frescos. La vegetación es variada: bosques mixtos de pinos, hayas, abedules, abetos en las umbrías, y quejigos, matorrales de boj, erizones y aliagas en las solanas.
La economía era de autoconsumo, de subsistencia. Se dedicaban a la agricultura, la ganadería y la explotación forestal.
Como vías de comunicación sólo disponían de una red de caminos de «herradura». Bergua y Cortillas conocieron la luz eléctrica, de muy mala calidad, los demás se alumbraban con teas, candiles y lámparas de carburo.
Al no disponer de los más elementales servicios, debido sobre todo al aislamiento y las duras condiciones de vida, a mitad del siglo XX sus habitantes empezaron a emigrar a los nuevos pueblos de los Monegros, a las zonas industriales de Monzón y Sabiñánigo y a las ciudades de Barcelona, Huesca y Zaragoza.
Ya en 1973 estaban totalmente deshabitados. En los últimos años Bergua ha recuperado la vida, gracias al asentamiento de personas llegadas de otras partes de España. Actualmente el resto sólo es visitado por senderistas, ciclistas, ganaderos y guardas forestales.